Discipulando Online.
Aviva tu obra en medio de los tiempos
Introducción
La gran comisión representa el mandato
dado por Jesús de llevar el mensaje del evangelio a todo lo largo y ancho de la
tierra. El Pentecostés dio inicio a la iglesia del libro de los hechos, la cual
se movía en la sobrenaturalidad y la dirección del Espíritu, a pesar de las
dificultades y aversión de las tinieblas.
Por siglos, la iglesia ha enfrentado la oposición de las tinieblas, pero nada ha impedido su avance como una demostración sobrenatural del poder del Espíritu Santo, lo cual se evidencia en avivamientos como el “Gran Despertar” (1730-1755) que marcaría la pauta para todos los demás avivamientos en el futuro.
También el año (1790-1840) marca el Segundo “Gran Despertar”, el cual ampliaría los limites alcanzados durante el Primer Gran Despertar y luego entre los años de (1855-1930) dieron vida al Tercer “Gran Despertar” donde se hizo énfasis en la segunda venida de Cristo y llevó misioneros alrededor del mundo y en la labor social de los evangélicos.
Nombres como D. L. Moody, Charles Spurgeon, Evan Roberts, George Müller, Hudson Taylor y muchos más, son personas que dispusieron sus corazones para cumplir el propósito de su llamado. Sin embargo, a pesar de sus esfuerzos, muchos de estos avivamientos terminaron, pero Dios nunca ha dejado que la llama se apague.
Una de las voces proféticas que retumban en el ámbito de las naciones es la del profeta Habacuc, quien un día intercedió ante Dios pidiéndole que hiciera algo poderoso a favor de su obra diciendo.
“Oh
Jehová, aviva tu obra en medio de los tiempos, En
medio de los tiempos hazla conocer”. Habacuc 3:2
Habacuc fue un profeta contemporáneo junto
con Jeremías Ezequiel y Daniel, quien levantó la voz profética clamando de Dios
una respuesta a su intercesión por su nación Israel lo cual evidencia que la
obra de Dios requiere ser recordada ante el trono de nuestro Dios.
El clamor del profeta Habacuc tiene una
vigencia extraordinaria pues aún en contextos diferentes La Obra de Dios en las
naciones de la tierra no cesa pues sufre adversidad y persecución, ahora ¿cómo
puede Dios avivar sui obra en medio de los tiempos?
Las escrituras nos recuerdan que desde
(Genesis hasta Apocalipsis) el compromiso de Dios por alcanzar a los perdidos y
nada ha podido impedir su cumplimiento.
Dos cosas importantes que destacan en
la intercesión de Habacuc:
Primeramente,
“aviva tu obra en medio de los tiempos”
Ahora, conceptualmente podemos definir
el termino como “avivar, o hacer que algo arda más” o en otro
sentido como “encender o animar” como en 2° Timoteo 1:6 cuando
Pablo advierte a Timoteo diciendo.
“Por lo
cual te aconsejo que avives el fuego del don
de Dios
que está en ti por la imposición de mis manos”.
Avivar el fuego o la llama que durante
generaciones encendió los corazones de miles de creyentes como Evans Roberts, quien
en
una ocasión vio la boca del infierno tragar a miles de personas por lo cual oró
al Señor pidiendo que “tapara la boca del infierno por un año” y
los registros históricos dan testimonio de que su oración fue escuchada como
resultado vino el despertar espiritual que sacudió Gales en 1904.
También la historia registra a John Knox,
quien en una oportunidad clamó a Dios diciendo “Dame a Escocia o me muero”
y así encontramos como Dios ha intervenido para “avivar su obra
en medio de los tiempos”.
Segundo,
Habacuc clamó diciendo: “En medio de los tiempos hazla
conocer”
Cada generación presenta retos
distintos, ya que no es solo la manera
de pensar que cambian, sino la manera de ver a Dios desde una perspectiva
humana o espiritual, la voz de Habacuc como profeta llega en un momento cuando
el pueblo espiritualmente declinó, pero él no se dejó llevar por el desánimo,
por lo cual oraba levantó pidiendo por un avivamiento.
El enemigo de las almas ha buscado destruir
los fundamentos escriturales y dogmas de fe establecidos por la palabra de Dios,
por eso es necesario devolverle a la iglesia su pureza inicial lo cual requiere
salir de lo conceptual a lo espiritual y aunque se levantan enemigos la iglesia
avanza imbatible en naciones donde “un pequeño fuego encendido esperando ser
avivado”.
La iglesia está llamada a llevar a cabo
los propósitos de Dios en la tierra, por tanto, se requiere, no solo gente entendida
sino de peso espiritual y determinados a enfrentar las circunstancias para
encender la llama del aviamiento una vez más.
La voz profética de Habacuc sigue
siendo escuchada por Dios y cuando estamos viviendo lo que muchos han llamado
la década del evangelismo las redes sociales y la internet, son
herramientas poderosas puestas en las manos de la iglesia que permitirán que se seguirá escuchando la oración,
Dios “aviva tu obra en medio de los tiempos”
La visión
del varón macedonio
El libro de los hechos 16 describe algo
poderoso que ocurre a Pablo y Timoteo cuando intentaban ir a Galacia
Y atravesando Frigia y la
provincia de Galacia, les fue prohibido por el Espíritu Santo hablar la palabra
en Asia; y cuando llegaron a Misia, intentaron ir a Bitinia, pero el Espíritu
no se lo permitió. Y pasando junto a Misia, descendieron a Troas. Y se le
mostró a Pablo una visión de noche: un varón macedonio estaba en pie, rogándole
y diciendo: Pasa a Macedonia y ayúdanos” Hechos 16:6-9
Hay mucha gente queriendo ir donde no
lo necesitan, pues solo buscan hacer turismo, pero la gran realidad espiritual
es otra, a Pablo y Timoteo les fue “prohibido por
el Espíritu Santo hablar la palabra en Asia” y luego en Bitinia
otra vez el
“Espíritu
no se lo permitió”, ahora, usted preguntara. ¿Por qué?
La revelación de la visión era clara: “Pasa
a Macedonia y ayúdanos”
Cuantos como el varón Macedonio están
de pie orando por alguien como Pablo disponga tiempo en su agenda misionera y
pueda venir, ayudar e impartirle apostólicamente de la gracia de Dios que le permitirá
avanzar en la obra de Dios.
Así como ocurrió con “Habacuc”
en su tiempo y con el “varón Macedonio” en los días de Pablo hoy
existe una “Macedonia” que espera una respuesta al clamor de
muchos que ven sus naciones sucumbir bajo la acción de las tinieblas y
experimentan persecuciones por cauda su fe.
La Iglesia: Es la base de la obra misionera.
Cada creyente está llamado a cumplir un
propósito dentro de la obra de Dios, Pablo no preguntó (por qué), sino que
avanzó y en Troas le fue
mostrado en “una visión de noche” un varón macedonio que en pie
oraba rogándole y diciendo: “Pasa a Macedonia y ayúdanos”
“Oh
Jehová, aviva tu obra en medio de los tiempos”
Habacuc no está hablando en términos
humanos (años o siglos) sino de La fidelidad a Dios y su Palabra manifestada en
la vida de hombres como (Hudson Taylor) Fundador de la Misión Interior de
China, (David Livingstone), misionero y
explorador en África, ((David Brainerd),
Pionero de un legado en misiones o (William Carey), Pionero de la India y padre
de las misiones modernas y así tantos
que a pesar de muchas pruebas y
sufrimientos no desfallecieron pues entendían que el propósito de Dios era
mayor
Su obediencia a Dios y sus historias
continúan motivándonos hoy en día.
La eternidad de Dios contrasta
con la temporalidad del hombre.
La Biblia indica que Dios es el que “muda
los tiempos y las edades” (Daniel 2.21). y también que “todo tiene su tiempo”
(Eclesiastés 3.1)
Las palabras de Habacuc trascienden el (tiempo
y la historia) y al igual como ocurría en sus días hoy él (sincretismo
religioso, el islam, el budismo, el hinduismo) y otras series de creencias
heréticas buscan captar adeptos ofreciéndoles un sin número de salidas al
problema de pecado y otros más audaces; (la reencarnación)
El clamor de Habacuc
está vigente
Sus palabras representan la carga por su
nación, ya que no solo está diciendo, “Oh Jehová, aviva tu obra en medio
de los tiempos” sino también recordándole que él no está sujeto al
tiempo (Cronos) puesto que, está más allá de la esfera de la temporalidad lo
cual le permite tener una perspectiva del pasado y el futuro desde la
eternidad.
Habacuc como profeta de Dios es la voz
que representa aquellos que enfrentan la adversidad de las tinieblas que buscan
detener la Obra de Dios sino un testimonio de su cuidado, ya que no solo hace
prosperar Su Obra “En medio de los tiempos” sino también que la
da a “conocer” a través del mensaje del evangelio a todas las
naciones.
Dios no deja que la llama se apague
Así como en el pasado Dios uso a
grandes hombres y mujeres llenos del Espíritu Santo para avivar el fuego del
avivamiento, no dejara apagar la llama que por siglos ha estado encendida en el
corazón de aquellos que claman para que el propósito de Dios sea cumplido
A Dios le encanta que le recordemos sus
promesas y Su palabra acerca de un gran avivamiento en nuestras naciones, lo
cual requerirá gente llena del Espíritu Santo y de un equipamiento que en otras
generaciones no estuvieron disponibles como la internet y las redes
sociales.
Imaginemos que hombres como William
Borden (1887-1913) quien rechazó una vida de comodidades para “llevar”
el evangelio a los (musulmanes) o Mary Slessor: (1848) Misionera
pionera en Nigeria o el “Hermano Andrew” conocido como el
“El contrabandista de Dios”, quienes impactaron a la gente de
su tiempo hubieran tenido redes sociales.
“Oh
Jehová, aviva tu obra en medio de los tiempos, En medio de los tiempos
hazla conocer”. Habacuc 3:2
El profeta Habacuc solo levanto el
clamor a Dios que trasciende el tiempo