Escogidos para grandes cosas
Texto base: Éxodo 1:15-22
Dios no ha cambiado, ha determinado que el hombre es el instrumento escogido para realizar las grandes cosas que darán cumplimiento a su propósito, Moisés fue un hombre marcado aún antes de nacer, fue salvado por las parteras del faraón llamadas Sifra y Fúa y así su destino fue trazado en medio de un tiempo de muerte, encontramos entonces la historia del gran Libertador de Israel que nació en un momento dónde está faraón era dueño de la vida de los hebreos.
Y
habló el rey de Egipto a las parteras de las hebreas, una de las cuales se
llamaba Sifra, y otra Fúa, y les dijo: Cuando asistáis a las hebreas en
sus partos, y veáis el sexo, si es hijo, matadlo; y si es hija, entonces
viva. Pero las parteras temieron a Dios, y no hicieron como les mandó el
rey de Egipto, sino que preservaron la vida a los niños. Y el rey de
Egipto hizo llamar a las parteras y les dijo: ¿Por qué habéis hecho esto, que
habéis preservado la vida a los niños? Y las parteras respondieron a
Faraón: Porque las mujeres hebreas no son como las egipcias; pues son robustas,
y dan a luz antes que la partera venga a ellas. Éxodo 1:15-19
El relato bíblico nos muestra como estas parteras se levantaron contra un
decreto de muerte, pues en ellas había temor de Dios, eran mujeres alineadas al
propósito divino, pues promovían la vida de la siguiente generación.
Estas parteras nos dan un ejemplo claro que acontece en este tiempo, porque
muchas mujeres desestiman el valor de la vida, ahora cada nueva generación trae
un propósito, promesas, muchos serán levantados para cumplir el propósito de su
generación como pasó con el rey David.
Porque a la verdad David, habiendo servido a su propia generación según la
voluntad
de Dios, durmió, y fue reunido con
sus padres, y vio corrupción. Hechos 13:36
Estamos en un tiempo donde aquellos que han sido escogidos para el
propósito alcanzarán la madures y estarán listos para recibir la visión, Dios
preparó a Sifra y Fúa para preservar la
vida de Moisés que fue salvado de las aguas para ser el instrumento divino y
guiar al pueblo hebreo a la tierra prometida, todo lo que acontece en nuestras
vidas está preparado por Dios de antemano para cumplirse en su momento.
Dios necesita mujeres responsables en quién confiar, el destino de la nueva
generación de niños y jóvenes nuevos creyentes pues necesitan que su vida sea
preservada y así cumplir el propósito de su generación como sucedió con el rey David.
Sifra y Fúa fueron instrumentos excepcionales pues representan una
generación de mujeres comprometidas con el propósito de Dios, quienes supieron
darle valor a su posición dentro del pueblo y no titubearon a la hora de
escoger a quién obedecer, son un ejemplo de valentía y arrojo para pelear
contra un decreto de muerte.
Todo cumple un propósito, nada es al azar, Dios escogió a la hija del
faraón para adoptar a Moisés e introducirlo al Palacio para ser educado y
preparado para que 40 años después fuera enviado por el Señor ante faraón
respaldado por una poderosa unción libertadora, que sería como como un
estandarte de Dios ante un gobernante despiadado y una luz que anunciaba el
final de una amarga esclavitud.
El propósito nos direcciona y la visión nos enfoca, es poderosa y va más
allá de nuestros días y viene de lo eterno, pues todo ha sido preparado de
antemano, Sifra y Fúa representan una generación de mujeres entendidas en las
cosas del Reino para preservar el propósito y cumplir con el destino profético
establecido por Dios en aquellos que como Moisés deben estar resguardados de
todo mal.
Y Dios hizo bien a las parteras; y el pueblo se multiplicó y se fortaleció
en gran manera.
Y por haber las parteras temido a Dios, él prosperó sus familias.
Entonces Faraón mandó a todo su pueblo, diciendo: Echad al río a todo hijo que
nazca, y a toda hija preservad la vida.
Éxodo 1:20-22
La vida de Sifra y Fúa son inspiradoras, mujeres de temple y coraje no se
intimidaron ante la orden de faraón expusieron sus vidas por los hijos de su
pueblo y quedaron en las páginas de la escritura como mujeres valientes y
temerosas de Dios, están llamadas a ser ejemplo para otras mujeres de fe que nos
tranzan sus principios en momentos de apremio y demuestran que el Ministerio de
las mujeres dentro del propósito de Dios es de gran importancia y
confiabilidad.
Dios prosperó sus familias como consecuencia de su temor a Él y hoy necesita “las parteras
espirituales” como Sifra y Fúa mujeres que
priorizan el propósito por encima de cualquier eventualidad, capaces de pelear
la vida espiritual de los jóvenes y niños (nuevos creyentes) de esta generación,
apartándolos de la exposición a la muerte espiritual y física pues deben
cumplir el propósito de su generación.
Somos la generación que al igual que Moisés muchos estuvieron en peligro y
fueron preservados para realizar las grandes cosas a favor del propósito de
Dios, y una poderosa unción libertadora para liberar naciones y una autoridad
para presentarse ante el faraón de este mundo y exigirle dejar salir al pueblo
del Señor de la esclavitud espiritual.
Conclusión
Finalmente, aunque luego faraón mandó a todo el pueblo diciendo que echaran
al río a todo varón que naciera y preservaran la vida de las niñas el más
importante de esa generación Moisés fue salvado de las aguas y 40 años después
recibió el llamado y la unción libertadora para luego ser enviado por Dios
delante de faraón para exponer la demanda de dejar salir al pueblo.