Versículo: Jonás 1;2;3;4
Introducción.
La humanidad se enfrenta a una gran degradación moral y espiritual lo cual evidentemente ha sacudido la sociedad, las bases de la familia y por ende afectado a la iglesia, Jesús enseñó acerca de las condiciones que experimentará el mundo y la necesidad de una respuesta espiritual, lo cual muestra las consecuencias del pecado, atrás quedan los días del oscurantismo espiritual y el impacto de la reforma que provocó una gran cisma espiritual en esa época, dando comienzo a la gran visitación de Dios al mundo, lo cual ha producido un impacto espiritual sobre naciones e individuos, millones cayeron bajo la gran convicción de pecado gracias al Espíritu Santo y entregaron sus almas a Jesucristo y posteriormente muchas naciones abrieron sus puertas a la gran visitación de Dios.
En el año de 1903, “Evans Roberts supo en su corazón que Dios había planeado un gran avivamiento para la comunidad de Gales. Y mientras predicaba en Moriah”, dijo: “He extendido mi mano y tocado la llama. Estoy ardiendo y esperando una señal”.
Evans Roberts oró durante 4 años para que Dios le permitiera predicar y un día de oración, le reveló cómo 100.000 personas recibirían a Cristo lo cual ocurriría de una forma sobrenatural, y ante una oportunidad que su pastor comenzó a predicar y noche tras noche en los siguientes 30 días, más de 37.000 personas aceptaron a Cristo, y en los 5 meses posteriores más de 100.000 personas habían recibido a Cristo, tal cual Dios le había revelado, lo cual trajo un despertar espiritual que luego pasó a Noruega, China, África, India, Corea y Estados Unidos.
Dios tiene sus maneras de impactar una nación o una ciudad, Evans Roberts vió como la boca del infierno estuvo cerrada por un año, como lo pidió, lo cual permitió que miles de personas pudieran arrepentirse y ser salvas, el impacto espiritual provocó cantinas cerradas por falta de clientes, estadios de fútbol vacíos y miles de deportistas predicando a Jesucristo en cualquier lugar, eran la evidencia de la poderosa visitación de Dios, algunos han catalogado a este avivamiento como “el avivamiento de Pentecostés aún más grande que Pentecostés”.
Esta historia nos recuerda uno de los avivamientos más poderosos descritos en la Biblia y a un hombre escogido para llevarlo a cabo: Jonás.
Vino palabra de Jehová a
Jonás hijo de Amitai, diciendo: Levántate y ve a Nínive, aquella gran
ciudad, y pregona contra ella; porque ha subido su maldad delante de mí. Y
Jonás se levantó para huir de la presencia de Jehová a Tarsis, y descendió a
Jope, y halló una nave que partía para Tarsis; y pagando su pasaje, entró en
ella para irse con ellos a Tarsis, lejos de la presencia de Jehová.
Jonás 1:1-3
Dios ordenó a Jonás, ¡ve a Nínive! La cual sería conocida como la precursora de uno de los más grandes y poderosos avivamientos descritos en la historia.
Los avivamientos tienen que ver con la acción de Dios interviniendo en las Naciones de la tierra a través de un mensaje lleno de unción y poder, esencialmente diseñado para alcanzar a los perdidos; Nínive necesitaba una visitación y Jonás fue enviado con un sencillo pero poderoso mensaje que haría que desde el rey hasta los más pequeños clamaran por misericordia y a pesar de todas las evasivas de Jonás el propósito de Dios se cumpliría.
Pero Jehová tenía preparado un gran pez que tragase a Jonás;
y estuvo Jonás en el vientre del pez tres días y tres noches. Jonás 1:17
Ciertamente Jonás no era el mejor ejemplo de piedad o misericordia pues tenía sus prejuicios personales contra los ninivitas y trato hasta lo último no cumplir la asignación de Dios, quien veía la gran necesidad espiritual de Nínive
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