Introducción
La Biblia enseña que Dios es eterno y todo lo creado cumple con un propósito y una de estas cosas, tal vez lo menos entendido y más desperdiciado por el ser humano es “el tiempo” y aunque han buscado medirlo o cuantificarlo con precisión con un reloj atómico, no se considera la verdadera importancia para lo cual se nos ha dado, el salmista; David dijo: En tu mano están mis tiempos…”. Salmo 31:15a
Ahora, ¿Qué entendemos cómo tiempo? El tiempo es una medida, no es un término abstracto sino un elemento que forma parte de la vida humana desde el mismo momento de la creación y puede ser definido en “épocas, eras o dispensaciones”, lo cual facilita su estudio y de hecho encontramos tres cosas interesantes respecto a su uso.
Primeramente: “todo tiene su tiempo y su hora debajo del cielo”, también que “todo lo hizo hermoso en su tiempo” y que “aquello que fue, ya es; y lo que ha de ser, fue ya; y Dios restaura lo que pasó”. Eclesiastés 3:1,11,15
La Biblia revela que en los días cuando el rey David asumió el trono de Israel, no solo necesitó de un equipo de guerreros sino también “estrategas” que no solo pudiesen proveer estrategias con las cuales poder avanzar, sino hombres con capacidad de “discernir lo espiritual”.
Ahora La Biblia revela que existían personas con estas cualidades
De los hijos de Isacar, doscientos principales, entendidos en los tiempos, y que sabían lo que Israel debía hacer, cuyo dicho seguían todos sus hermanos.1° Crónicas 12:32
Isacar, el noveno hijo de Jacob y quinto de Lea, quien dijo “Dios
me ha dado mi recompensa, por cuanto di mi sierva a mi marido; por eso llamó su
nombre Isacar y sus descendientes habían sido dotados de una unción
extraordinaria por Dios; eran “entendidos en los tiempos” este
término viene de la palabra hebrea “biynah” la cual habla de tener discernimiento, conocer el
significado, entender algo.
“Entendidos en los tiempos” solo 200 hombres de Isacar (jefes) formaban parte del equipo del rey David y se movían en un fuerte “Don profético del Espíritu” y además del conocimiento que venía de la ley y los profetas y la observación del mundo que les rodeaba y les permitía interpretar los tiempos y las épocas.
Isacar el “asno fuerte” eran capaces de llevar la carga por Israel pues no sólo entendían “los tiempos” y “la sazón” (estación, Kairos) o el tiempo adecuado para accionar, sino que sabían lo que Israel debía hacer.
La unción de Isacar es necesaria y es un elemento imprescindible dentro del mover profético de este tiempo, es una unción, un don de discernimiento espiritual el cual se manifiesta en tres mantos (unciones), la unción de prosperidad, la unción espiritual y la unción del conocimiento de los tiempos.
Ahora La Biblia revela que Dios “muda los tiempos”.
El muda los tiempos y las edades; quita reyes, y pone reyes; da la sabiduría a los sabios, y la ciencia a los entendidos. El revela lo profundo y lo escondido; conoce lo que está en tinieblas, y con él mora la luz. Daniel 2:21-22
Primeramente;
Dios es el dueño y controlador del tiempo y además puede “quitar reyes y poner reyes”
conforme a su propósito, ahora en el reino de Dios existen cosas “secretas y reveladas” donde las
cosas reveladas no necesitan descubrirse, pero si los secretos y misterios del
Reino que Dios quiere revelarnos. Deuteronomio 29:29
Ahora La Biblia enseña que Dios tiene su propio sentido del
tiempo.
Mas, oh amados, no ignoréis esto: que para con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día.2° Pedro 3:8
Ahora la eternidad es la que fundamenta el tiempo, la fuente desde donde mana y lo que le da sentido, pues Dios es Eterno, el arquitecto divino quien tiene el dominio sobre “los tiempos”, y aquí la palabra "tiempos” del hebreo Et, traduce: “período, tiempo determinado, propicio o apropiado” lo habla de un tiempo diseñado para cumplir sus propósitos eternos.
Cuán importante es comprender la unción de los hijos de Isacar